domingo, 6 de junio de 2010

parece mentira como la cosa más tonta del mundo puede hacer que mi día cambie y se convierta en algo bueno, en algo inspirador y me de ganas de volver a dibujar.

hacía meses que no me ponía delante de un papel y hacía algo que realmente quisiera, no la típica tontería que no lleva a ninguna parte. pero ahora, a las 3 de la madrugada, y después de un día de no hacer nada y seguir pensando en el sentido de las decisiones que tomo, me he sentado frente a los apuntes, y sin más he empezado a  hacer figuras que tienen sentido.

No hay comentarios: